miércoles, 26 de septiembre de 2012


Problemas de lectoescritura 
  • falta de fluidez lectora.
  • silabeo.
  • poca o ninguna comprensión lectora.
  • necesidad de utilizar señalizadores (dedo, lápiz, etc.).
  • dificultad para la lectura silenciosa.
  • problemas de dislexia, dislalia, lateralidad.
  • dificultad en la expresión escrita.
  • errores ortográficos.
  • dificultad para entender causa y efecto, y establecer secuencias.
  • dificultad para resumir, organizar y estructurar la información.
 
No todos los niños asumen el proceso de lecto-escritura con normalidad y de manera fácil. En algunos casos este aprendizaje puede verse alterado por dificultades en los movimientos oculares necesarios para leer o escribir correctamente. El conjunto de estos movimientos se denomina OCULOMOTRICIDAD y presenta tres tipos de habilidades visuales:

- SEGUIMIENTOS: habilidad para seguir un objeto con los ojos de manera rápida y precisa sin ayudarse del movimiento de la cabeza

- SACÁDICOS: pequeños saltos que realizan nuestros ojos entre las letras o entre las palabras cuando estamos leyendo; capacidad para seguir un texto sin dificultades

- FIJACIÓN: capacidad para mantener una visión estable en un objeto estático

Para poder reconocer si existe algun problema de este tipo que nos esté afectando a nivel escolar, tanto padres como profesores, podemos evaluar si el niño presenta alguno o algunos de estos síntomas durante el trabajo en visión próxima:

- Salta letras, palabras o líneas al leer
- Se pierde en el papel
- Acompaña la lectura con el dedo
- Mueve mucho la cabeza de un lado a otro cuando lee
- Se acerca demasiado al papel al leer o al escribir
- Necesita releer palabras
- Es lento en la lectura
lectoescritura
    Es un proceso y una estrategia. Como proceso lo utilizamos para acercarnos a la comprensión del texto. Como estrategia de en enseñanza-aprendizaje, enfocamos la interrelación de la lectura y la escritura, y la utilizamos como un sistema de comunicación.
Abc 
 La lectura y la escritura son elementos inseparables de un mismo proceso mental. Por ejemplo, cuando leemos, vamos descifrando los signos para captar la imagen acústica de estos y simultáneamente los vamos cifrando en unidades mayores: palabras, frases y oraciones para obtener significado. Cuando escribimos, ciframos en código las palabras que a su vez vamos leyendo (descifrando) para asegurarnos de que estamos escribiendo lo que queremos comunicar. 

Si bien la lectoescritura necesita de mecanismos motores: ojos, manos y en ocasiones oídos, el proceso de cifrar, descifrar e interpretar es función del intelecto. El propósito fundamental de la lectoescritura es construir significados. Conociendo su proceso podemos diseñar y ofrecer actividades dirigidas a desarrollar y refinar destrezas lingüísticas necesarias para una mejor utilización de las artes del lenguaje.  La enseñanza de lectoescritura consiste en proveer actividades que estimulen el desarrollo de destrezas de codificación, descodificación e interpretación de contenidos textuales. (Cabe apuntar, que la enseñanza-aprendizaje de lectoescritura comienza desde que el bebé descubre el lenguaje, y se prolonga durante toda la vida.)